Acusa Bush a demócratas de favorecer a los enemigos de EU en Irak

Notimex / La Jornada On Line

Washington. El presidente de Estados Unidos, George W. Bush, declaró este sábado que los plazos del Congreso, controlado por los demócratas, para el retiro de los soldados en Irak “da la victoria a nuestros enemigos”.

Los demócratas “aprobaron propuestas que impondrían restricciones a nuestros comandantes militares y pondrían una fecha arbitraria de Irak, dando a los enemigos la victoria que ellos desesperadamente quieren”, señaló.

En su discurso sabatino de radio, Bush reiteró su petición a líderes del Congreso, con quienes se reunirá la semana próxima, que aprueben sin condiciones fondos para los soldados en Irak.

“Cuando nos reunamos el miércoles, espero escuchar cómo planean los miembros del Congreso cumplir con sus responsabilidades y proporcionar a nuestros soldados los fondos que necesitan”, apuntó.

Indicó que hace 68 días envió al Congreso su proyecto de gastos de emergencia para la guerra, pero que los demócratas aprobaron “restricciones” a los comandantes militares que “perjudican” a los soldados en Irak.

Agregó que “las propuestas de los demócratas también gastan millones de dólares en proyectos domésticos que no tienen nada que hacer con la guerra, como fondos para visitas guiadas al Capitolio de Estados Unidos y para almacenamiento de cacahuates”.

El mandatario anunció que en los próximos días los líderes militares notificarán al Congreso que se verán forzados a transferir mil 600 millones de dólares de otras cuentas militares para cubrir los vacíos por la demora del Congreso en aprobar los fondos.

“Estas acciones son apenas el comienzo y mientras más demore el Congreso, peor será el impacto en los hombres y mujeres de las Fuerzas Armadas”, recalcó.

Bush reconoció las diferencias sobre el rumbo en Irak pero manifestó que el Congreso “debe ahora trabajar rápidamente y aprobar un proyecto limpio que financie a nuestros soldados” sin “esposar a nuestros generales en el terreno y sin gastos domésticos externos”.

El líder de la mayoría demócrata en el Senado, Harry Reid, criticó esta semana la invitación de Bush al indicar que “el presidente nos está invitando a la Casa Blanca con precondiciones”.

“Somos un poder independiente de este gobierno y, por nuestra Constitución, tenemos la misma voz que él tiene. Y tiene que escucharnos, porque estamos hablando por el pueblo estadunidense, él no”, señaló.