Comparan el acuerdo Telerman-Carrió con la Alianza

La primera reacción de la Casa Rosada a la alianza entre el jefe de gobierno Jorge Telerman y Enrique Olivera para encabezar la fórmula con la que competirán en las elecciones del 3 de junio, y que fue oficializada ayer, no tardó en llegar.

Recuerdo. Lo hizo a través del jefe de Gabinete, Alberto Fernández, habitual vocero de la Casa de Gobierno y uno de los encargados de seguir de cerca las elecciones porteñas y de apuntalar al candidato oficialista, el ministro de Educación, Daniel Filmus.

"Me permito recordar los resultados que generaron alianzas donde un presidente dice una cosa y un vice dice lo opuesto", deslizó el funcionario en diálogo con radio América.

Se refirió, aunque sin nombrarla a la Alianza, la coalición política que la UCR y el Frepaso sellaron en 1997 y con la que ambos partidos llegaron al poder en 1999. El proyecto quedó trunco en 2001, cuando el entonces presidente Fernando De la Rúa abandonó el gobierno en medio de una profunda crisis que terminó con la represión de protestas callejeras y la muerte de más de treinta personas.

Un año antes, en octubre de 2000, había renunciado al cargo Chacho Alvarez, la pata frepasista de la alianza por desacuerdos con De la Rúa en el manejo del escándalo por el pago de coimas en el Senado.

Objetivos comunes. El acuerdo entre Telerman y Carrió fue en cambio defendido por el propio Olivera.

En declaraciones a radio Continental afirmó que la coalición Autonomía por Buenos Aires, como quedó formalizado el frente, "fue hecha para la ciudad sobre la base de objetivos y valores que se comparten".

Además, volvió a pedir mayor autonomía para el distrito. "No podemos seguir siendo discriminados por el Congreso, privándosenos de la disponibilidad de una policía propia, de dirigir las acciones que hay que ejecutar para darle tranquilidad a nuestra gente", reclamó.

Oficialización. Ayer, Telerman con la presentación de Olivera, hoy legislador radical, como su compañero de fórmula dio un nuevo paso en su progresivo alejamiento del kirchnerismo y quedó más cerca de Elisa Carrió, acérrima opositora del Gobierno. De todas maneras, el jefe de gobierno evitó adelantar posicionamientos ante las presidenciales de octubre.

De todos modos, sostuvo que el frente electoral sellado entre el jefe de Gobierno porteño y la líder de ARI de cara a las elecciones porteñas constituye "una opción" aunque concluyó: "Ellos sabrán adónde ir con eso".

Contra Macri. Por otra parte, Fernández aprovechó para volver a embestir contra Mauricio Macri con una nueva comparación con el gobernador neuquino Jorge Sobisch, fuertemente golpeado por el asesinato del maestro Carlos Fuentealba en una protesta violentamente reprimida por la policía.

"El, que reclama mano dura para terminar con la delincuencia, ahora dice que no tiene nada que ver con el gobernador", disparó el jefe de Gabinete en alusión al líder de Pro, que el mismo día de la muerte de Fuentealba anunció que su alianza con el neuquino, que avanzaba desde hace meses había fracasado.