Cuba/Suecia: crece la tensión

El canciller de Suecia, Carl Bildt, intensificó su postura respecto a lo que considera una violación de los derechos humanos en Cuba y a la supuesta violación del correo diplomático de su país en la Habana, en entrevista exclusiva con la BBC.

Consultado sobre las declaraciones del representante cubano, Juan Antonio Fernández Palacios, durante una sesión del Consejo de Derechos Humanos en Ginebra, Bildt fue categórico.

"Es indignante en todas sus formas y me tomó por sorpresa", dijo Bildt a la BBC.

"Es un ataque desesperado de un régimen desesperado", consideró Bildt.

El canciller aclaró que no tenía intenciones de retractarse de sus comentarios acerca de los derechos humanos en Cuba.

Acusaciones mutuas

El clima de discordia se hizo evidente hace 10 días en una sesión del Consejo de Derechos Humanos en Ginebra.

En esa ocasión, Fernández Palacios reaccionó airadamente a la acusación del canciller sueco de que La Habana no respetaba tales derechos.

Al tomar la palabra, Fernández Palacios consideró que el ministro actuaba con "hipocresía" al criticar a Cuba omitiendo cualquier referencia a la situación de la base estadounidense de Guantánamo.

El representante cubano fue más allá y dijo que el discurso recordaba a la Suecia imperialista.

"En Cuba no se persigue a los inmigrantes ni se intenta hacer una limpieza étnica para retener en el país a aquéllos que respondan a los patrones raciales de los conquistadores vikingos", expresó el embajador cubano ante el Consejo de Derechos Humanos de la ONU.

Al respecto, Bildt indicó a la BBC que "los días de los vikingos han quedado atrás. Eso fue hace unos 1.000 años".

Señaló que Suecia "es uno de los países más abiertos de Europa" en temas de inmigración, ya que allí viven personas de todo el mundo, "incluyendo a refugiados cubanos, donde tienen la libertad de expresión que se les niega en su propio país".

Volvió a recalcar que "todo el mundo sabe (que el gobierno de Cuba) es una dictadura" donde "no se respetan los derechos humanos".

Bildt además dijo que su embajada en Cuba tenía constancia de que las autoridades locales están abriendo su correo diplomático, lo cual es "una señal muy perturbadora".

"Es una ofensa muy grave a las reglas de comportamiento internacional (...). No sabemos a qué está ligado", finalizó en su entrevista con la BBC.

"Violación del correo"

El jueves, la cancillería sueca protestó por el supuesto caso de violación de su correo diplomático en La Habana y anunció que convocará al embajador cubano en Estocolmo, Jorge D. Payret Zubiaur.

Será la segunda vez en lo que va del mes que el diplomático es llamado a rendir cuentas por la creciente tensión en las relaciones entre Cuba y Suecia.

Luego del acalorado debate en la ONU, Bildt había dicho a los periodistas que tales declaraciones eran "inaceptables" y, según la agencia sueca de noticias TT, había llegado a hablar de una "crisis diplomática".

"La ONU tiene la obligación de vigilar el respeto por los derechos humanos, que están especialmente limitados en Cuba, y tenemos la obligación de decirlo. Eso no debe provocar un ataque histérico a toda una nación como han hecho los cubanos", comentó Bildt.

A sólo días de ese episodio, este miércoles, el portavoz de la cancillería sueca, Christian Carlsson, denunció que se había descubierto en la embajada en La Habana que varios sobres de la correspondencia diplomática habían sido abiertos antes de llegar a las oficinas.

"Esto añade elementos a las relaciones diplomáticas que ya están tensas", dijo el vocero en rueda de prensa.

Agregó que este miércoles se le informó al embajador cubano en Estocolmo la preocupación del gobierno por esta situación.

Carlsson indicó que todavía esperan las correspondientes disculpas oficiales, tanto por los comentarios de Fernández Palacios como por la supuesta violación de las cartas.

FUENTE: BBC