Denuncian irregularidades por los fondos que gira la Nación

Desde 2003 hasta hoy el dinero de los fondos específicos que gira la Nación a las provincias casi se triplicó. Pero las críticas a los mecanismos que se usan para la transferencia de partidas siguen siendo la mismas: se distribuyen en forma preferencial, no llegan a todos los beneficiarios, faltan controles y no se incentiva un sistema de premios y castigos para los gobernadores que hacen un mal o buen uso de esos fondos.

No son sólo objeciones de carácter administrativo. También se trata de apreciaciones políticas en virtud de repartos "discrecionales" y "arbitrarios" de la Casa Rosada a los gobernadores. Así lo destacan más de 15 informes que desde 2003 hasta 2007 elevó la Auditoría General de la Nación (AGN) al Congreso en diversos relevamientos que hizo en todo el país.

En las conclusiones recabadas en esos informes de la AGN, a los que tuvo acceso LA NACION, se reitera que los fondos específicos dirigidos a las provincias "no garantizan la equidad efectiva de derechos para todos los habitantes" y añaden que las partidas que gira la Casa Rosada "deberían constituir una unidad donde se integren de manera transparente y accesible al escrutinio público".

En este sentido, el organismo de control presidido por el radical Leandro Despouy mencionó que no hay una coordinación entre la Nación y las provincias en la instrumentación de obras de infraestructura o en los planes sociales. También queda en claro en esos trabajos de auditoría que los criterios de focalización que se aplicaron en diversos programas sociales resultan "ineficaces, ineficientes y antieconómicos".

La inexistencia de una nueva ley de coparticipación, sumada a una fuerte recaudación impositiva, provocó que el gobierno de Néstor Kirchner adoptara regímenes y fondos específicos para transferir a las provincias. Pero en todos los informes de la AGN existen coincidencias en que "no necesariamente esos regímenes mantuvieron el criterio de reparto en torno a indicadores objetivos".

El incremento de transferencias de fondos de la Nación a las provincias fue sustancial en los últimos años, según surge de los datos de la AGN. Mientras en 2003 el Gobierno giró a las provincias 22.663 millones de pesos, este año se proyecta un envío total de $ 55.721 millones.

Allí están contempladas la transferencia de fondos del Programa Alimentario, el plan de Emergencia Alimentaria, los planes de Seguridad Alimentaria, los fondos del Fonavi y las transferencias por programas de vivienda y de obra pública en general, entre otros.

Casos paradigmáticos

Tanto la oposición como el oficialismo en el Congreso coincidieron, aunque con obvios matices, en las opiniones vertidas por los informes críticos de la AGN (de lo que se informa por separado).

Hay casos paradigmáticos que ilustran las objeciones de la AGN. Por ejemplo, en Chaco y Corrientes no hay un registro único de beneficiarios de programas sociales, con lo cual se superponen subsidios y los fondos no llegan a poblaciones situadas por debajo de la línea de pobreza.

También hay ejemplos de manejo discrecional de fondos para la obra pública y la construcción de viviendas en San Luis y La Rioja, donde el dinero se gira a una cuenta única del Tesoro provincial que impide hacer un seguimiento del destino final de las partidas. Se destacan, a la vez, casos como los de Santa Cruz y Corrientes, donde no se entregaron viviendas porque faltaba la terminación de obras de infraestructura, a pesar de que los fondos habían sido girados.

También los trabajos de la AGN destacan la falta de controles y evaluaciones de los créditos asumidos por las provincias con organismos financieros. Y hacia el futuro se reclama la necesidad de contar con un marco analítico que permita evaluar los sistemas de transferencia.

En relación con los fondos para la vivienda, los fondos para obras de infraestructura y obra pública, los informes de la AGN desde 2003 hasta hoy señalan que hace falta:

·Arbitrar los medios necesarios para evitar que las contrataciones se dilaten produciendo demoras en la ejecución de obras y generando mayores costos.

·Planificar las obras de infraestructura en concordancia con las de vivienda a fin de evitar desfases y ajustar los plazos para la habilitación simultánea de las obras.

· Se registró un elevado índice de morosidad en la cobranza de las cuotas por facturación de las viviendas, lo que redujo el flujo de fondos hacia el financiamiento de nuevas obras.

Estas falencias se reiteraron en fondos girados a Formosa, Catamarca, Chaco, Corrientes, San Luis, La Rioja, Tucumán, Tierra del Fuego, Misiones, Santa Cruz y San Juan.

Planes sociales

Por otra parte, los informes de la AGN desde 2003 hasta diciembre de 2006 plantearon las siguientes irregularidades en los fondos para los programas sociales nutricionales:

·Los fondos nacionales ingresan sin cumplir con la periodicidad que fija la ley 24.049.

·El plan no cuenta con una metodología efectiva para incorporar nuevos establecimientos escolares y orientar la selección de los beneficiarios.

·Hay carencias de un diagnóstico socioeconómico sobre la vulnerabilidad social y la inseguridad alimentaria.

·Se recomienda evaluar las modalidades de compra más convenientes para asegurar costos razonables.

En relación con la transferencia de fondos destinados al programa materno-infantil, la AGN advirtió:

·Se debe mejorar la coordinación de las agencias estatales a cargo de los programas nutricionales. En muchas provincias se encontró una falta de articulación entre programas provinciales y nacionales.

·Se encontraron desvíos de los fondos nacionales a otras partidas provinciales.

Las mayores fallas en estos programas se registraron en Chubut, Chaco, Corrientes, La Rioja, Formosa, Santa Cruz y Misiones.