Se endurece la protesta contra Sobisch en Neuquén

Pocas horas después del multitudinario y pacífico reclamo que protagonizaron por el asesinato del maestro Carlos Fuentealba, los docentes de Neuquén resolvieron esta noche endurecer la protesta frente a la Casa de Gobierno y levantar los cortes carreteros, mientras que los estatales anunciaron una huelga por 48 horas.

Los delegados sindicales de toda la provincia del gremio docente tomaron la decisión de continuar con el paro en una reunión plenaria en la que debatieron la estrategia que seguirán para para confrontar con el gobernador Jorge Sobisch, a quien responsabilizan por la muerte de Fuentealba.

Paro de estatales. En tanto, los estatales de Neuquén, nucleados en la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE), y los profesionales y técnicos de los hospitales de la provincia, resolvieron hoy un paro de 48 horas.

La medida fue adoptada en un plenario de secretarios generales de ATE-Neuquén y otro de las asociaciones de profesionales y técnicos de hospitales, en repudio por la represión aplicada a los docentes de ATEN.

Asambleas. Los docentes estuvieron reunidos hoy en asambleas en distintos puntos de la provincia para evaluar cómo seguir con el plan de lucha.

Renuncia. El secretario general del gremio docente neuquino, Marcelo Guagliardo, dijo hoy a LANACION.com que la protesta ya trascendió las fronteras del reclamo docente. “Esto ya no tiene un objetivo sectorial sino que el pedido es por un cambio profundo en la politica de Neuquén” y añadió que ese cambio supone “sí o sí” la renuncia de Sobisch.

Los docentes continuaban desde ayer acampando frente a la Casa de Gobierno de la provincia.

Gendarmes. En tanto, el Gobierno no descartó la posibilidad de enviar efectivos de Gendarmería a la convulsionada provincia, aunque aclaró que sólo tomará esa decisión si Sobisch o la Justicia así se lo piden.

El ministro del Interior, Aníbal Fernández, se encargó de dejar en claro que su cartera no recibió de parte del gobierno neuquino ninguna solicitud de refuerzos de seguridad ante eventuales disturbios.

Además, puntualizó que el ministerio a su cargo mandó refuerzos "a Salta cada vez que lo pidió", y que sólo partirán contingentes a Neuquén si "hay un delito federal o por pedido expreso de la Justicia". Enseguida añadió: "No tuvimos ninguna situación en Neuquén, ni hemos tenido un pedido especifico del gobierno de la provincia", afirmó.

Fernández se mostró así más conciliador que la semana pasada, cuando, a pocas horas de la muerte de Fuentealba, provocada por el disparo de una granada de gas lacrimógeno atribuido a un policia, había asegurado: "Cada provincia es dueña de su seguridad. No soy el celador de Sobisch".